Todos los niños necesitan vitaminas y minerales. Ayudan a transformar la energía de nuestros alimentos y a construir músculos, huesos, sangre y tejidos. Sin una fuente regular de vitaminas y minerales, no se puede mantener el crecimiento normal y la buena salud.

Durante los años de crecimiento de los niños, es importante asegurarse de que reciban todas las vitaminas y minerales que necesitan a diario.

Debido a que el cuerpo no puede almacenar todas las vitaminas y minerales esenciales, algunas tienen que ser suministrados a diario con la alimentación. Desafortunadamente, muchos niños tienen hábitos alimentarios pobres que pueden hacer difícil conseguir todas las vitaminas y minerales que necesitan. Para complementar su dieta, pueden tomar Vitaminoso y de esa manera ayudar a asegurar una nutrición adecuada.

Vitamina A: ayuda a mantener un sistema inmune sano (defensas).

Vitamina C: antioxidante necesario para encías sanas. La vitamina C ayuda a elevar las defensas.

Vitamina D: promueve la absorción del calcio.

Vitamina E: ayuda a promover la salud del corazón.

Tiamina (b1), Riboflavina (b2), Niacina, Vitamina B6 y Biotina: Las vitaminas del complejo B ayudan al cuerpo a transformar los alimentos en energía necesaria para funcionar de forma óptima. Tomar las vitaminas del complejo B es importante para que el niño crezca sano y fuerte.

Vitamina B12: esencial la formación sana de glóbulos rojos. Especialmente difícil de conseguir en la dieta para los que evitan los productos animales.

Ácido fólico: esencial para el crecimiento y la producción de ADN. Ayuda a la formación de glóbulos rojos.

Acido Pantoténico: es esencial para el metabolismo de los carbohidratos, proteínas y grasas, como así también para la formación natural en el cuerpo de hormonas necesaria para el funcionamiento normal del organismo.

Calcio: ayuda a mantener huesos y dientes fuertes. El calcio ayuda a contraer los músculos.

Magnesio: necesario para el metabolismo energético, ayuda mantener sanas las células de cuerpo en nervios y músculos, y ayuda a los músculos a relajarse y contraerse. El magnesio sirve también como componente de huesos.

Zinc: promueve el crecimiento y reparación de los tejidos. El zinc es esencial para el crecimiento. Ayuda al cuerpo a utilizar los carbohidratos, las proteínas y las grasas.

Cobre: ayuda al cuerpo a formar hemoglobina, necesaria para llevar el oxígeno a los glóbulos rojos.

Selenio: es un poderoso antioxidante, es decir que disminuye el proceso de envejecimiento celular. Aumenta la producción de glóbulos blancos.

Manganeso: es necesario para el crecimiento de los niños, esta relacionado con la formación de huesos, tejidos y coagulación de la sangre.

Potasio: participa en la transmisión de impulsos nerviosos y junto al sodio regula el nivel de agua dentro y fuera de las células. Regula el ritmo cardiaco.

Colina: es muy importante para el funcionamiento del cerebro, para la formación de membranas celulares y para el metabolismo de las grasas.